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Death from Above 1979 – The Physical World

Death from Above 1979 - The Physical World portada
Warner Bros, 2014
Productor: Dave Sardy
Banda: Sebastien Grainger, Jesse F. Keeler

Géneros: , ,

7.4

Curiosas son las circunstancias en las que Death From Above 1979 han llegado hasta este segundo largo. Resumiendo, una pareja canadiense (bajo-teclados/batería) lanza un EP y acto seguido un disco que se convierte en un hito de la música contemporánea. Sería el momento y el lugar adecuado, el caso es que su punk-rock pegadizo y bailable cala tanto que se convierte en un lastre para la banda, que al poco se separa. Años después deciden aprovechar que la industria musical está como está para hacer caja tocando en un par de festivales y finalmente se animan con un nuevo disco.

Consciente de su calidad de «one-record-wonders», la pareja concibe esta continuación no con ánimo de superarse, sino para acallar las voces que demandan más de ellos. En esta cuerda floja se presenta un disco del que no debemos demandar grandes cosas. Comparar esto ahora con «You’re a Woman, I’m a Machine», paradójicamente, no procede, aunque sea la misma banda. «The Physical World» es más pop y más rock, entiéndase estos términos como una coartada para subrayar la normalidad, la falta de la aspereza y la alienación que caracterizaron su debut.

Dejando esto de lado, no sé tú, pero yo he venido aquí a disfrutar. Y en eso DFA1979 sí que cumplen, aún con una notable bajada de revoluciones. Ya nos lo anunció “Trainwreck 1979”, single de mayor carga pop que nunca con un irresistible gancho soul en el estribillo. La pareja ya no es aquella humeante máquina de testosterona, pero sigue siendo capaz de retener su sonido en el punk-rock melódico de «Right On Frankenstein» o el rock setentero de «Always On». A veces incluso se les va de las manos y casi se pasan al AOR, como en «Virgins».

El baile sigue estando ahí y no puede ser más patente en «Crystal Ball», claro que no resulta ni la mitad de vibrante que lo que recordábamos. En cambio la lánguida «White Is Red» con sus interesantes detalles synth-pop o la propia «The Physical World», que empareja heavy metal con volátiles teclados, muestran que la fórmula del dúo no es tan limitada como parece. Da incluso la sensación de que «The Physical World» esté atado a un sonido porque es lo que le deben a los fans. En este sentido no me extrañaría nada que si su aventura continúa, tengamos un tercer disco más libre y sorprendente.

Pero de momento «The Physical World» es un disco más que correcto que no necesita vivir a la sombra de su predecesor (aunque inevitablemente lo haga). Por eso resultan algo incómodos guiños como esos sonidos de fuelle de «Gemini» que tanto nos hacen pensar en el furibundo comienzo de «You’re a Woman…». Es una complicada situación, DFA1979 ya no son los mismos que hace diez años, pero son lo que son gracias a lo que hace diez años hicieron y sobre ello mismo reflexionan con varios dardos en el disco hacia la cultura del hype y la industria musical.

 

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1 de enero de 2014